En todo el proceso de la construcción de las losas de Hormigón, el del curado es uno de los pasos más importantes, debido a que influye directamente con la resistencia y las demás características de la losa final.
¿Qué es el Curado del Hormigón?
Durante el proceso de fraguado y los primeros días de endurecimiento, se producen pérdidas de agua por la evaporación, creándose una serie de huecos o grietas capilares en el hormigón, que disminuyen su resistencia, para compensar estas pérdidas y permitir que se desarrollen nuevos procesos de hidratación con aumento de resistencia, el hormigón debe curarse con abundante agua; es en ese sentido, que brindamos la siguiente definición:
“El Curado del Hormigón, es el proceso por el cual se busca mantener saturado el hormigón hasta que los espacios de cemento fresco, originalmente llenos de agua, sean reemplazados por los productos de la hidratación del cemento”.
En general, hidratar el hormigón es mejor que evitar que éste pierda el agua inicial (agua de amasado), debido a que la duración e intensidad del curado dependen fundamentalmente de la temperatura y la humedad del ambiente, también de los efectos del clima (viento y sol), el tipo y la cantidad de cemento, la relación A/C, etc., porque a mayor intensidad de éstas, se requerirá un curado más prolongado (hasta de 15 días en casos extremos).
La importancia del Curado de las Losas de Hormigón
El curado tiene la finalidad de evitar que el hormigón de la losa quede seco prematuramente, sus principales finalidades son:
- La reacción química del agua y del cemento se interrumpe por falta del agua necesaria, de modo que el hormigón no adquiere las propiedades que se esperaban, se produce una contracción precoz, generando la formación de fisuras.
- La falta o la insuficiencia del curado, daña la durabilidad del concreto y más particularmente, sus características superficiales.
La falta de curado es especialmente grave para la durabilidad de la losa, porque de ésta depende la impermeabilidad (y por tanto de la compacidad) de las capas exteriores de hormigón (carpeta de compresión vaciada in situ), que son precisamente las más sensibles a una falta de curado. En efecto, el núcleo de las piezas (salvo que sean losas muy delgadas), mantiene el contenido de humedad durante un periodo prolongado y se ve menos afectado por falta de curado, que las capas superficiales.
En consecuencia, de no curarse bien el hormigón, la capa de recubrimiento de las armaduras (carpeta de compresión) resultará porosa y permeable, con lo que la vida útil de la estructura se verá gravemente reducida.
Diferencias entre el Agua de Amasado y Agua de Curado
El agua, es un elemento de especial cuidado dentro del hormigón, debido al papel importante que desempeña, como agua de amasado y principalmente como agua de curado.
- El Agua de Amasado, cumple una doble función en el hormigón, por un lado participa en la reacción de la hidratación del cemento, y por otro confiere al hormigón el grado de trabajabilidad necesaria para una correcta puesta en obra. La cantidad de agua de amasado debe limitarse al mínimo estrictamente necesario para conferirle a la pasta la trabajabilidad requerida, según las condiciones en obra, debido a que el agua en exceso se evapora y crea una red de poros capilares que disminuyen su resistencia.
- El Agua de Curado es la más importante durante la etapa del fraguado y el primer endurecimiento, tiene por objeto evitar la desecación, mejorar la hidratación del cemento y evitar la retracción prematura.
Conclusión
En vista de que Tecnopreco S.R.L., se posiciona como uno de los más importantes proveedores de Viguetas Pretensadas, para la construcción de Losas Aligeradas a nivel Nacional y como parte del Asesoramiento Técnico que brinda a sus clientes, recomienda efectuar el curado de las losas recién vaciadas por el lapso mínimo de 7 días, a partir de la fecha del vaciado. De esta manera llegamos a optimizar la resistencia máxima de nuestra losa y además de prolongar la vida útil de la estructura.
Fuente: Tecnopreco SRL.